8 de febrero de 2012

Ayer y hoy del Fútbol

Aun no he llegado a los cuarenta, pero creo que incluso antes de venir al mundo ya estaba jugando al Fútbol en el vientre de mi madre, seguro que ella sintió patadas, supongo que serian fruto de mis ganas de empezar a disfrutar del juego. La verdad es que siempre a sido parte fundamental en mi vida, me recuerdo en cualquier sitio con un balón, entonces los niños íbamos con el a todos los sitios, yo recuerdo llevarlo, por ejemplo, al colegio, lo llevaba en una bolsa de plástico, de las que dan en cualquier supermercado, durante todo el camino iba dándole patadas a esa bolsa, que por supuesto nunca llegaba a casa, el balón tal vez. El que llevaba el balón era el jefe de la pachanga, si las cosas se ponían mal el dictaba las normas, lo que daba una gran ventaja, además de poder escoger a sus compañeros.


   Este amor por el Fútbol, me llevo a practicarlo desde los cinco años hasta los veintiuno, edad en la que sin interrupción, pase a ser entrenador, llevo treinta y cuatro años consecutivos o como jugador o como entrenador, dato difícil de superar pero que creo, aun tendrá mucha mas continuidad. La verdad es que en estos años el Fútbol ha cambiado una barbaridad, trataré de explicar algunos de estos cambios, que producirán la nostalgia de mis contemporáneos y el asombro o la extrañeza de los chicos de las nuevas generaciones con los que por otra parte, tengo tanto contacto y a los que tanto aprecio, pues siendo el presente son a corto o medio plazo, el futuro de nuestro Fútbol.

  Lo primero que ha cambiado dando un giro enorme a nuestro Fútbol base especialmente, son los campos sintéticos, en los ochenta los campos eran únicamente de tierra , arena o césped aunque en la mayoría de los casos se convertía en barro, debido a que  numerosos equipos entrenaban en el y ya conocemos cono es el invierno en Asturias. Por supuesto los entrenamientos eran menos técnicos y primaba la fuerza y el físico en general, debido al barro y al agua. Ahora los campos son perfectos al tragar toda el agua los campos sintéticos, sin ningún problema ; ese juego de balones para toda una temporada que siempre se tuvo, se convertía antes al ser arenosa la superficie, en balones deformes y pesadisinos, en los últimos meses de las competiciones, nada que ver con el momento actual, donde los balones apenas sienten el paso del tiempo.


 
  Cuando yo jugaba al Fútbol, las botas eran en prácticamente su totalidad, de tacos de aluminio, con las consiguientes repercusiones en forma de lesiones, y las botas de colores no existían, eran todas negras, el mayor adorno que se encontraba era las tres míticas rayas de Adidas, poco mas, creo recordar que las primeras botas no negras las puso en España, Alfonso Pérez, un buen delantero que jugo entre otros en el FCB, R Madrid, Betis o Getafe y que precisamente da nombre al estadio de estos últimos. Eran Joma y eran lo nunca visto hasta entonces. Que decir de los estadios de primera, su césped era muy defectuoso en su mayoría, en el zona del portero, siempre había una calva en la hierba; y en que campo cuando el equipo de casa jugaba mal, o el arbitro no tenia su día, no había una lluvia de almohadillas con la única defensa de dos nacionales con un escudo diminuto.

  Que decir de aquellos marcadores simultáneos, que ponían diez anuncios en chapa y al lado un marcador, por ejemplo, calzados Martínez 0-2; Cafetería Luis 3-1, os preguntareis los mas jóvenes que como se descifraba esto, pues bien, había que comprar el periódico local del día y recortar la publicidad, cada anuncio era un partido, pero solo en el periódico ponía cual. Los aficionados solían llevar radio, pero en la mano y pegada a la oreja, nada de auriculares, curiosisimo.


 
  Los árbitros solo vestían de negro; todas las gradas tenían vallas metálicas y había entradas con asiento o de pie las segundas, lógicamente, mucho mas caras ;los balones solo eran blancos, en ocasiones con pintas negras, Di Stefano llamaba a la pelota por esto, la pecosa; se televisaba solo un partido semanal, los sábados; los jugadores hablaban con los inalámbricos en el descanso y al final saltaban todos los periodistas que querían al campo; las camisetas no tenían el nombre del futbolista detrás y la numeración no era fija; había muchos jugadores con bigote o incluso con barba, difícilmente ahora vemos a uno; si se ganaba en casa eran dos puntos, fuera, 2+2 , empatar en casa 1-1 y fuera 1+1, mientras que perder casa era 0-2 y fuera simplemente 0. Así los equipo bien clasificados podían tener 11+5, o uno de los colistas 2-6. Se decía que los equipos tenían positivos o negativos. Los goles del domingo solo se veían en un programa de TVE, el mítico Estudio Estadio.



Podría seguir enumerando diferencias pero ahora me centrare mas en lo deportivo. Los cambios eran solo dos, los mismos que numero de extranjeros que podían jugar; el portero podía cogerla con la mano siempre que quisiera ; las faltas de ultimo defensa no eran expulsiones, ni tampoco las manos para evitar un gol; no existían las cesiones al portero, el ritmo de juego era mas lento, el físico era inferior, y había menos rigor táctico;  nadie comunicaba el tiempo de descuento, la Copa de Europa solo la jugaba el Campeón de Liga y el Campeón de la Copa del Rey jugaba la extinguida Recopa de Europa.

  Para los que piensan que en el Fútbol esta todo inventado, este texto supongo que les hará reflexionar, pues este deporte esta en constante evolucion en todos sus ámbitos, a buen seguro que me
quedaran en el tintero numerosas diferencias entre el Fútbol de hace dos o tres décadas y el actual, os animo a enumerar las que queráis en los comentarios.

  Los mas veteranos afirman que el Fútbol de antes, si que era de verdad, las generaciones actuales se quedan con el de hoy, cuidemos lo bueno y luchemos por eliminar lo negativo, si es mejor o peor uno u otro, da para otro texto, pero yo, ahora  no entrare en ello.

1 comentario:

MM dijo...

Está guapo el blog, te iré leyendo siempre que me acuerde. Yo no recuerdo mucho del fútbol de los 80 porque era demasiado pequeño, pero sí el de los 90. Es verdad que había menos rigor táctico, el ritmo de juego era más lento etc etc, pero yo por lo menos disfrutaba más con el fútbol de antes que con el de ahora. Defensas como Martagón, Gorriarán, Super López, Momparlet... Esos estoy seguro que no iban a dejar que Cristiano les hiciese dos bicicletas, porque de la ostia que le calzaban lo mandaban 3 meses para la enfermería.

Es curioso lo del bigote, es verdad que ahora nadie lo lleva y si algún día aparece un futbolista a jugar con él, seguro que sale en la prensa. Es inevitable acordarse del Tato Abadía o de Zigmantovic...

Por suerte, el futbol base que es donde nos encontramos sí que ha evolucionado para mejor en cuanto a terrenos de juego, material etc etc. Pero por desgracia ahora va a ser raro ver a un crío llevar el balón al colegio para jugar en el recreo o verle un sábado saltando las vallas del colegio para echar una pachanga con los amigos. Ahora se lleva más jugar al PES en la Play Station. Y ese juego callejero de los colegios o las plazas, que cada vez se ve menos, considero que era tan importante o más que cualquier entrenamiento.

Siempre se aprenden cosas nuevas, lo de la puntuación con el positivo o negativo si que la recuerdo en las clasificaciones, pero pensaba que era por la diferencia de goles a favor en contra, no recordaba lo de ganar fuera +2, enpatar +1 etc.

Muy guapo el Blog, lo dicho, a ver si me acuerdo de ir leyendo, y quizás, de ir comentando.

PD: Un pequeño apunte, Alfonso no llegó a jugar nunca en el Getafe. Es extraño que hayan puesto ese nombre al campo, pero el único mérito que hizo Alfonso para que pusieran su nombre al estadio fue nacer en dicha localidad.